Leche Pascual
Rubén Vázquez, el Instagranjer más joven

No descubrimos América si decimos que el empleo en el sector primario no genera especial interés entre los jóvenes españoles. En vez de preguntarnos por qué no interesa hemos hecho justo lo contrario. Le hemos preguntado a Rubén Vázquez, ganadero de 21 años en la granja VAZMA de Ávila (y uno de nuestros instagranjers) por qué quiere dedicar su vida al campo.
No hay un testimonio más definitivo que el suyo: “soy feliz. Me he criado y he crecido entre vacas. Verlas todos los días, cuidarlas, ver qué les pasa, etc. es lo que me hace estar a gusto”. Ser feliz en el trabajo es la Dulcinea de muchos, una quimera. Insiste: “empecé ayudando en las dos granjas de mi familia (la paterna y la materna) y poco a poco, cuando fui creciendo vi que lo hacía porque me gustaba, no porque fuera una obligación”.
¿Entonces? Le seguimos preguntando y le decimos que la gente ya no quiere trabajar en el campo y cómo él vive esa circunstancia. “Es un trabajo más sacrificado porque son los 365 días al año. No hay vacaciones. Los animales te requieren siempre”.
La modernización del mundo rural
Produce extrañeza encontrarse a un chico de 21 años que dice que es ganadero. “La gente que se ríe es porque piensa que el trabajo de los ganaderos es algo súper anticuado, todo manual y no es verdad. El campo se ha modernizado muchísimo. No tiene nada que ver con lo que era antes. Hay maquinaria y hay salas de ordeño. Incluso los tractores son diferentes”.
En la granja de la familia de Rubén ya tienen los podómetros para las vacas, con los que se controla mucho mejor el celo de las vacas y por tanto se les da un trato más específico según sus necesidades. Además, han instalado ordenadores en la sala de ordeño para evaluar la cantidad y calidad de la leche y aplican programas para la eficiencia productiva.
La comunicación y la relación con Leche Pascual da tranquilidad a la hora de establecer métodos de trabajo. “Sabemos que ante cualquier problema o necesidad solo tenemos que levantar el teléfono y Leche Pascual está ahí”.
Rubén, con vistas al futuro y sabiendo el papel que ocupa la maquinaria y la tecnología en el mundo rural, estudia un grado superior en mantenimiento industrial para mantener las instalaciones de la granja siempre en el mejor estado.
La experiencia de Instagranjers
Rubén es el más joven del grupo así que está más al día y se maneja bien. Pero también para él ha sido un descubrimiento en el descubrimiento de la estética en las granjas. “Cuando piensas en hacer una foto a algo que ves todos los días, parece que no te pueda sorprender pero buscas que sea bonita así que descubro nuevos puntos de vista que pasaba por alto”.
Los días en la granja de Fuentespina con Miquel Montoro y el resto de ganaderos que forman #Instagranjers los recuerda como una gran experiencia: “fue muy bonito y muy enriquecedor. Miquel me sorprendió muchísimo porque no lo conocía y es encantador, una persona maravillosa. Igual que mis compañeros, nos interesamos los unos por los otros y repetiría la experiencia encantado”.
No hay más preguntas. Está claro que lo de Rubén es la granja, el campo y las vacas. Lo de Rubén es trabajar feliz y con mucha pasión. Por ahora este es el factor común que hemos conocido en nuestros instagranjers.
Gracias, Rubén.